En la búsqueda de mi arco iris: El Apocalipsis.

Fuente: http://www.efesalud.com/

A #LocuraDePadre, después de pasar un mes tomando el jarabe para la tos, le tocó repetirse el espermiograma con la esperanza de haber mejorado los valores.

Cuando llegó el resultado del exámen yo no lo podía creer ¡en vez de mejorar estábamos empeorando!

El paciente informó haber derramado una pequeña fracción de la muestra. La muestra presenta viscosidad muy elevada (++), astenozoospermia y  teratozoospermia. El porcentaje de vitalidad se encuentra disminuido. La recuperación de espermatozoide móviles se encuentra por debajo de los  parámetros normales, así como la morfología. Se sugiere ICSI.

Al leer este comentario me sentí desolada, no sabia como decírselo a mi esposo y en medio de mi desesperación llamé al Dr. Bebe para que me dijera por que el examen estaba peor que el anterior. Solo nos dijo vengan mañana al consultorio.

Al día siguiente en la consulta del médico nos dijo que nos quedáramos tranquilos que los números para el estaban muchísimo mejor, que no entendía mi preocupación, que dejara de revisar diagnósticos por Internet, que yo me dedicara a mis computadoras que el médico era el. Le mandó tres semanas mas de jarabe a mi esposo y nos veríamos al tener los resultados.

En la siguiente cita el me diría como proceder para hacer una laparoscopia para destapar mi trompa izquierda.

En este momento #LocuraDePadre empezó a desconfiar en el médico, a mi me pareció muy raro que me contestara de esa manera.

Se acabó, ¡NO VAMOS MAS!

Después de 2 meses tomando el bendito jarabe para la tos, llegó el momento de hacer el 3er espermiograma, e increíblemente en vez de mejorar seguíamos empeorando.

Muestra con viscosidad muy elevada (++) y oligoastenoteratozoospermia.

Yo seguía indagando por Internet porque no era posible pasar de una muestra total de 50 millones de espermatozoides a 15 millones en 2 meses, eso no tenia sentido.

A mi esposo le hicieron pruebas hormonales y todo estaba bien, le hicieron un eco testicular y todo bien pero los valores de los espermiogramas iban hacia el piso.

Fuimos al Dr. Bebe y nuevamente le comente mi preocupación por la bajada de los valores y nuevamente se molestó, nos explicó que para el los valores del lavado espermático eran los que estaban subiendo y era lo que le importaba, resulta ser que el veía los valores para hacer un tratamiento de fertilidad como la inseminación artificial o la fecundación in vitro y nosotros queríamos mejorar los valores para intentarlo de forma natural.

También nos habló sobre la laparoscopia que tenía pensado hacerme, ya el no consideraba hacérmela por que mi seguro no la cubría (el nos había dicho en la consulta anterior que había una manera de meterla por seguro). Que era mejor ir directo a una inseminación. Yo le pregunte que si al tener una trompa completamente tapada no se reducían las probabilidades a la mitad (es decir un 13% de factibilidad). Nuevamente se molestó por mi comentario porque el era el doctor y era quien sabía lo que hacia.

Mi esposo y yo le preguntamos cuanto podría ser el costo de la laparoscopia, si funcionaba estábamos dispuestos a pagar la operación. Al doctor le brillaron los ojos y nos dijo que el costo era (en ese momento) de 38 mil bolívares fuertes, que era una operación ambulatoria. Le dijimos que lo íbamos a pensar y que lo contactaríamos.

Al cerrar la puerta del consultorio, #LocuraDePadre me dijo que no quería volver mas nunca a una consulta con el, nos mando un medicamento que en vez de ayudarnos a nosotros, estaba ayudando a su bolsillo. Que el nunca nos quiso ayudar a mejorar sino que preparó el ambiente para un tratamiento complejo.

Perdimos completamente la fe en el Dr. Bebé.

Y ciertamente mas nunca lo volvimos a ver, en diciembre del 2011 nos llego la noticia que el doctor se suicidó en su consultorio. Nunca supimos los motivos y honestamente tampoco nos interesó. Si hubiésemos decidido hacer el tratamiento con el nos hubiésemos quedado a mitad de camino, sin dinero, sin bebe y sin doctor.

Pagamos muy caro las consecuencias de no consultar una segunda opinión.